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Carlos Antonio Gorosito repudia el ataque a la vicepresidenta Cristina Fernández

2 de septiembre de 2022 15:17

UNA BALA CONTRA LA DEMOCRACIA QUE POR FUERTE NO CUMPLIO CON SU OBJETIVO.

"ME SUMO A TODAS LAS VOCES DE REPUDIO CONTRA EL INTENTO DE ASESINATO DE LA VICEPRESIDENTE DE LA NACIÓN. TODOS DEBEMOS TRABAJAR INTENSAMENTE POR LA CONVIVENCIA DEMOCRÁTICA ENTRE LOS ARGENTINOS" CARLOS ANTONIO GOROSITO.

"Pasada las 23,30 hs del día de ayer viajaba de regreso a nuestra ciudad y fue el momento en que tome conocimiento del intento de asesinar a la Vicepresidente de Nación. Por suerte quien intentó asesinarla ha sido identificado. Ahora deberá responder ante la Justicia. Sumo mi voz a las de todos los que ya se han expresado repudiando el hecho. Lo hago de la forma enérgica que sea posible. Era una bala contra la Democracia el intento de homicidio contra la Dra. Cristina Fernández de Kirchner. También se conmovió la sociedad cuando se intentó asesinar al Presidente Dr. Raúl Alfonsín en la ciudad San Nicolás en febrero de 1991, era también una bala contra la Democracia que por suerte como ahora como alcanzo a cumplir con su objetivo. La Argentina nuestra Argentina no se puede convertir en un país donde el adversario político se transforme en un enemigo al que incluso hay que eliminarlo físicamente. Nuestra sociedad está viviendo desde hace tiempo un intenso clima de violencia verbal que no tarda en convertirse en algunos casos en violencia física. Se da en el campo de la vida cotidiana entre integrantes de la sociedad civil, pero también en el ámbito de la política nos estamos direccionando hacia un plano muy peligroso de violencia verbal que derivará inexorablemente en violencia física. Hay una irresponsabilidad creciente de distintos actores de la sociedad de la dirigencia política, de la dirigencia social, de ciertos sectores mediáticos (opositores y oficialistas) que contribuyen a crear el clima de violencia que se está incubando en el país. Algunos actores políticos han llegado plantear la necesidad de la pena de muerte hacia sus adversarios, otros aventuran la muerte de personas de determinadas filiaciones políticas. Todo es tremendamente absurdo. Muchos están contribuyendo a que el clima de violencia se instale en el país y esto puede producir un efecto dominó, que la violencia se haga indetenible. Las expresiones de los distintos extremos que están en el ámbito de nuestra dirigencia política, pero también de la prensa, de la dirigencia empresarial, gremial y social contribuyen a este clima con sus discursos de odio. No podremos construir una sociedad mejor con este clima imperante. Las expresiones públicas de ciertos sectores actores políticos, sociales o mediáticos influyen en la gente y luego esta actúa en consecuencia. Desde el fondo de la historia hay enfrentamientos entre la dirigencia y sectores políticos y sociales de argentina y eso se expresa luego en el pueblo. En el pasado más reciente fueron duros los enfrentamientos entre radicales y peronistas, entre antiperonistas y peronistas. Ricardo Balbín uno de los máximos dirigentes radicales de ese momento pagó con la cárcel por pensar distinto. Pasado el tiempo cuando Perón regresó al país luego de su largo exilio, los dos líderes se abrazaron y ese signo de convivencia se reflejó en la sociedad. No debemos hacerle el juego a los cultores del odio. La Unión Cívica Radical tanto desde la dirigencia como desde la militancia debe contribuir a generar un clima de paz en la Argentina. Somos el partido de las libertades públicas, de la convivencia, de la vida, la paz, de la vida. Quienes se expresen en sentido contrario no están alejados del ideario del partido que fundaran Alem e Yrigoyen. Todo el arco político se ha expresado contra este intento de homicidio. Nuestro compromiso es trabajar por una Argentina mejor en el campo de nuestras naturales discrepancias. Una de nuestras responsabilidades fundamentales es desterrar para siempre los discursos de odio, las diferencias que tenemos de cómo se deben solucionar los problemas del país se deben dirimir en las urnas. Y los presuntos casos de corrupción que cometamos quienes podemos pasar por la función pública los debe dormir la justicia. Pero es la paz que debe guiar los destinos de los argentinos. Debemos apostar y trabajar para que así sea".

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